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#PROYECTOS DE ARQUITECTURA COMERCIAL
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Restaurante y ámbito social del nuevo metropolitano de Iradier
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Para el nuevo proyecto de la zona de restaurante y zona social del nuevo gimnasio
Metropolitan Iradier se buscaba reflejar una atmósfera más actual, joven y fresca acorde con
la nueva imagen de gimnasio que aporta la marca Metropolitan. Sin perder la elegancia de
los espacios y ornamentos clásicos de la casa donde está ubicado.
Lo más importante en este proyecto era relacionar todos los espacios para conseguir las
máximas visuales posibles. Así como potenciar el uso de restauración o bar indistintamente
de la zona donde te encuentres sintiéndote a gusto a cualquier hora del día. De aquí la idea
de trabajar con varias opciones de asiento y distintas alturas.
Hemos respetado la arquitectura existente pintando todo el envolvente en un color cálido
para poder trabajar a partir de una caja neutra y se ha mantenido la distribución de espacios
pero modificado la distribución de los elementos. Hemos utilizado materiales nobles e
iluminación puntual y cálida.
Se ha bajado la barra a una altura cómoda para poder sentarse, disfrutar comiendo en ella y
ver la vitrina con el producto fresco. Gracias a las puertas correderas de pizarra, se permite
presentar dos momentos del día diferentes, el primero de desayunos donde se puede ver
zumos, vasos o botellas de agua, y un momento más nocturno donde una iluminación de led
ilumina las botellas. El copero de hierro y cristal ayuda a aportar calidez mediante la
iluminación. En esta zona se han ubicado también unos bancos corridos de madera de roble
con cojines y una la mesa comunal donde se puede comer a la vez que trabajar con un portátil
frente a la barra, con una lámpara baja en tubular de hierro con iluminación baja.
En la entrada de los salones se ha ubicado un mueble de camareros en nogal y piedra negra
para reservar las mesas centrales sin perder la visual de los espacios. Se combinan banco
corrido a altura tradicional con mesas bajas realizadas en madera de roble y mármol blanco
con butaca baja tapizada. Se ha potenciado la iluminación en las mesas mediante lámparas de
brazo negras que salen de la pared a una altura más baja.
La galería queda totalmente abierta a los salones desde donde se puede ver el jardín exterior y
la entrada de luz natural. Hemos querido situar una zona más de estar donde los sofás
tapizados están a una altura apta para comer en unas mesas de mármol blanco y taburetes de
madera. Esta misma idea de sofá y mesa baja se repite en zona que queda bajo la escalera que
da acceso a la zona de estética y entrada al gimnasio.
En el reservado hemos mantenido la chimenea existente pero revestida en madera formando
una estantería lateral que alberga los libros que nos remite a una sensación hogareña. Se
sitúan unas mesas de hierro y madera de roble, que están diseñadas para que funcionen tanto
en grupo como individualmente.
