EL MUSEO JUDÍO DE CHIPRE

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#PROYECTOS DE ARQUITECTURA PÚBLICA

Una historia contada a través del diseño contemporáneo, el museo judío de Chipre hace una declaración audaz, creando un cuadro visual impactante para las generaciones futuras. La historia de los valientes chipriotas que ayudaron a los refugiados del Holocausto a reconstruir su forma de vida para volver a entrar en un mundo en el que no sólo se sentían seguros de volver a sus identidades, sino también de sentirse orgullosos de ellos, es algo que hay que contar. Situado en el corazón de Larnaca, junto al centro de la comunidad judía, este edificio, aunque modernista, tiene fuertes influencias históricas y está impregnado de cultura judía.

Inspirándose en la vestimenta con flecos que tradicionalmente llevaban los judíos, se ha diseñado una fachada que cubriría el exterior de la fachada del edificio. La evolución de esta idea comenzó con la conceptualización de la tela de algodón/lana llamada "beged" de la prenda en un diseño arquitectónico similar, teniendo en cuenta características como los flecos especiales trenzados y anudados también llamados "tzitzit". La fachada representará una forma de tejido aireado que emula el plegado de la tela tradicional ortodoxa asquenazí. El esquema de colores de la fachada servirá al doble propósito de parecer completamente blanco durante el día, simbolizando la pureza espiritual de la tradición judía, con las cálidas luces de fondo, iluminándose en líneas verticales a lo largo de la superficie durante la noche, imitando el diseño del Tallit Katan.

El museo está construido principalmente con hormigón y vidrio, y la fachada está hecha totalmente de una superficie sólida de nueva generación. Es un material cálido al tacto y similar a la piedra natural. Está compuesto por dos tercios de minerales naturales (ATH - trihidrato de aluminio) y un bajo porcentaje de resinas de alta resistencia