Casa del Vino

CHYBIK + KRISTOF Architects & Urban Designers han anunciado la finalización de la Casa del Vino, un bar de vinos y sala de cata situado en Znojmo, en el corazón de la región de Moravia.

Situado en una cervecería del siglo XIX convertida y su espacio técnico adyacente añadido a la estructura en la década de 1970, el proyecto domina una capilla del siglo IX y una iglesia gótica vecina, lo que refleja las numerosas capas e historias arquitectónicas de la ciudad. Fusionando dos espacios con patrimonios distintos y adoptando enfoques individuales - y entendimientos - de renovación para cada uno de ellos, los arquitectos responden al pasado y a la función estructural del edificio respectivo, repensando al mismo tiempo las nociones convencionales de restauración.

Restaurada y preservada para conservar su esencia original, la cervecería del siglo XIX es tratada como un sitio patrimonial. Más que arquitectónico, la renovación es funcional. El clásico edificio rectangular se redefine como un espacio histórico de exposición y bar de vinos, invitando a los visitantes a sumergirse en la rica historia de la cultura del vino de Moravia.

Por el contrario, conservando sólo la estructura exterior de la antigua sala técnica para albergar un espacio interior totalmente nuevo, la Casa del Vino la reconsidera como un amplio volumen regulable y vacío. Una disposición lúdica de volúmenes orgánicos dispuestos en varios planos divide este "cubo blanco" en espacios individuales, reflejando así la escala y la atmósfera de las bodegas tradicionales de la región a través de varias salas más pequeñas interconectadas. Este vino recién concebido redefine tanto la arquitectura inicial de la sala como su función.

A través de un complejo conjunto de ventanas asimétricas, distribuidas para reflejar la división del espacio interior en varias salas, la antigua sala técnica se abre a las vistas circundantes: las iglesias vecinas, el pueblo, el valle del río. Revelando las vistas exteriores a un edificio que rara vez las ha reconocido, las ventanas invitan a los visitantes a dialogar con la región y su paisaje, a la vez que anclan esta estructura aparentemente anacrónica como parte de los tesoros arquitectónicos de la ciudad. Alentando esta interacción y reflejando este collage histórico, el tono de la fachada es una combinación de los distintos colores de los edificios vecinos, afirmando así un sentido de pertenencia arquitectónica e histórica.

La Casa del Vino se hace eco de los edificios originales y de la historia de transformación de la ciudad, a la vez que recuerda la compleja interacción entre las estructuras sociopolíticas que han marcado su arquitectura. En concreto, los arquitectos llaman la atención sobre la sala técnica como expresión del cinismo del régimen comunista, que en un principio erigió esta estructura arquitectónicamente desnuda en el corazón de una ciudad históricamente rica.

Hablando del proyecto, el arquitecto fundador Ondřej Chybík explica: "La Casa del Vino desafía las nociones tradicionales de restauración de edificios históricos. La presencia de dos estructuras distintas, cada una con su propia historia y función original, nos inspiró a adoptar enfoques igualmente distintos para la renovación. Por un lado, nos adherimos a una restauración más bien ortodoxa, basada en la preservación; por otro lado, adoptamos un enfoque más experimental -e inusual- que replantea por completo la estructura inicial. De esta manera, nos sumergimos en el patrimonio y el paisaje de la ciudad, a la vez que establecemos la Casa del Vino como una parte, una reconciliación y una continuación de su historia arquitectónica"

Al mismo tiempo, CHYBIK + KRISTOF están en el proceso de completar la Bodega Lahofer, situada en los cercanos viñedos moravos de Dobsice. Alejándose de cualquier interferencia con el paisaje, la estructura se hace eco de las pendientes naturales del terreno circundante, mientras que una columnata de arcos se alinea con el ritmo de las filas de viñas, creando una simetría visual perfecta con la naturaleza. Con un centro de visitantes interconectado, instalaciones de vinificación y sala de degustación, y un anfiteatro que alberga eventos culturales públicos, la bodega abrirá sus puertas en la primavera de 2020.

Equipo del proyecto: Ondřej Chybik, Michal Krištof, Ondřej Mundl, Luděk Šimoník, Martin Holý, Roman Koplík, Lenka Vořechovská, Vratislav Zika, Hanka AlGibury, Petr Novák, Michal Klimeš