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Loft en la calle 72 / Nauzet Rodríguez

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El ajustado presupuesto de este proyecto no permitió que el desarrollo del programa espacial incluyera dos dormitorios como las dimensiones del lote sugerían desde el principio. En su lugar, optó por desarrollar un proyecto de remodelación integral que reconfiguró el espacio (usado comercialmente hasta ahora) en un tipo de "loft"

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La propiedad original había sufrido al menos dos transformaciones importantes a lo largo de su historia (la irregularidad del terreno era el resultado de una división del espacio original que se vio afectada durante un proceso de venta anterior), lo que planteaba esta oportunidad de recuperar las formas originales

Las divisiones interiores fueron eliminadas para dejar sólo los muros de piedra originales; un salón justo antes del patio recientemente construido; y en la fachada, dos estructuras añadidas como un garaje. Es en este espacio donde la división de la propiedad y la remodelación previa desdibujaron más las características originales de la construcción. Por ello se decidió crear una nueva fachada con una solución contemporánea que no existía en esta casa, pero que era visible en otras del mismo barrio de la ciudad: fachadas con dos texturas

Las paredes interiores fueron cortadas y convertidas en columnas y vigas visibles para abrir y unificar los salones. Elementos estructurales que fueron pasados a planos que definían los espacios dentro de un conjunto diáfano.

La longitud sobrante del techo del desván proporcionó un lugar para la columna vertebral de todo el proyecto: un patio interior que permite los salones en una organización en "c" y proporciona luz y ventilación a todos los espacios. Además, proporciona luz y aire al espacio verde de transición entre el dormitorio y el baño, y da un alivio indispensable a la comprensión del conjunto

La conexión con la luz natural sigue reforzada por la presencia de los largos tragaluces en el pasillo y el baño. Espacios que, sin llegar a ser oscuros, creemos que deben incorporar tanta luz natural como sea posible.

La cocina es el nexo de unión entre el interior y el exterior con la terraza, el jardín, la piscina y el nuevo jardín. En la parte final de la propiedad, frente al lote, se encuentran los baños para la piscina/huéspedes, y un área de servicio con máquinas.

El proyecto puede caracterizarse utilizando tres elementos fundamentales: el blanco, como el material presente en el espacio original; el cemento visible, mediante una aplicación y texturas distintas; y la piedra, un elemento omnipresente en las casas antiguas de Mérida. A diferencia del blanco preexistente, el negro cubre los volúmenes incorporados: cocina y armario.