Centro de Integración Deportiva para Zonas Rurales La Pradería / Natura Futura Arquitectura

La Pradería se encuentra en el territorio rural de la ciudad de Babahoyo con una población aproximada de 17.985 habitantes, donde la ausencia de instalaciones deportivas no es suficiente; su infraestructura apenas cubre las necesidades básicas y casi nunca se habilitan espacios complementarios. Es importante explorar cómo las entidades privadas pueden promover la creación de espacios que vinculen y reinterpreten la arquitectura local con las actividades deportivas.

Jimmy, un promotor deportivo que se ha dedicado a organizar campeonatos de fútbol y foot-tenis dentro de la ciudad, reconoce la necesidad de crear un nuevo espacio dentro de su terreno privado para establecer un nuevo vínculo social y deportivo entre lo urbano y lo rural.

La Pradería, con unas dimensiones de 10m x 8m, pretende ser un portal que difumine la línea entre el exterior y el interior para vincular la actividad deportiva con su entorno. El proyecto se delimita lateralmente con dos muros de ladrillo; en el lado derecho se encuentran los servicios, como los baños y un almacén; mientras que en el lado izquierdo se ubica el mobiliario para las reuniones sociales. En el primer nivel se encuentran la cocina y el bar de comidas, construidos con los escombros de ladrillo de la misma construcción. En el segundo nivel, los balcones y las terrazas potencian la reunión y la contemplación de las actividades.

El objetivo del proceso constructivo es trabajar y revalorizar la mano de obra local y sus técnicas tradicionales, fusionándola con tecnologías híbridas como las estructuras metálicas, que permiten poner sobre la mesa nuevas posibilidades.

La envolvente del proyecto está generada por paneles metálicos plegables compuestos por celosías de madera y mosquiteras; una técnica utilizada en las construcciones tradicionales de la zona. Su disposición en diagonal mejora la estabilidad de los paneles, el flujo de ventilación natural y evita la entrada de insectos. La apertura de estos elementos permite vincular la vida social con las actividades deportivas.

Una arquitectura de convergencia que recupera el papel del equipamiento deportivo de la iniciativa privada como plataforma para la generación y el fortalecimiento de los vínculos entre las zonas urbanas y rurales.