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#PROYECTOS DE ARQUITECTURA RESIDENCIAL
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Can Santacilia / OHLAB
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Can Santacilia es un proyecto residencial de 3.300 m2 con 15 viviendas y zonas comunes. Se trata de una cuidada rehabilitación de dos edificios situados en pleno casco antiguo de Palma de Mallorca.
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Los edificios datan del siglo XII o XIII, aunque el edificio visible desde la plaza Tagamanent fue registrado en los archivos de la ciudad en 1576 como Can Santacilia. Desde entonces, ambos edificios han sufrido varias modificaciones, por lo que el estado existente antes del proyecto OHLAB es del siglo XVII, con una reforma posterior en el siglo XVIII. Además, ambos edificios sufrieron reformas durante el siglo XX destinadas a dividirlos y convertirlos en varias viviendas, por lo que los encontramos muy modificados respecto a su estado original.
El primer reto fue el de la responsabilidad histórica, que comenzó con la investigación de las distintas intervenciones a lo largo del tiempo para descubrir, recuperar y poner en valor los principales elementos arquitectónicos y espacios. No se trató de borrar y ocultar las alteraciones que se produjeron a lo largo de la historia para recuperar un pasado ideal que en realidad desconocemos, sino de descubrir las diferentes etapas e intervenciones, reconociendo elementos de valor en cada una de ellas. Para que esta operación fuera eficaz y reintegrar el edificio en la actividad de la ciudad, decidimos actualizar sus espacios y utilizarlos para el siglo XXI.
Por un lado, se requería un edificio residencial moderno y confortable, con todos los servicios e instalaciones necesarios para un estilo de vida contemporáneo. Por otro, nos enfrentamos a una estructura compleja y dividida, difícil de integrar con una fachada y un volumen protegidos del siglo XVI. El proyecto de renovación de OHLAB aprovecha la complejidad de los edificios existentes con el potencial de generar espacios inesperados. La intervención resuelve cada vivienda con una distribución y soluciones individualizadas, combinadas con las nuevas zonas comunes y conexiones y conformando la unión de ambos edificios. El resultado final es un único edificio que basa su singularidad en la recuperación de la esencia histórica y en la apuesta por la contemporaneidad.
Se combina una selección de materiales naturales, nobles y locales con la introducción de otros nuevos nobles, como piezas de bronce antiguas, piedras locales, paños espejados, detalles de porcelana, lino local y tejidos de algodón. El proyecto recupera el patio de entrada que había sido alterado en las reformas del siglo pasado, devolviendo a este espacio su antiguo esplendor.
El patio se convierte en la entrada principal al corazón del edificio, comunicando con las terrazas ajardinadas hacia arriba y con las zonas comunes como un gimnasio y una piscina cubierta con spa que da directamente al patio. A pesar de las restricciones constructivas que implica una reforma histórica en un edificio protegido, el proyecto se ha diseñado desde el principio con parámetros de sostenibilidad, con el fin de maximizar su eficiencia energética, aumentar el aislamiento térmico, cuidar los puentes térmicos y utilizar un eficiente sistema de aire acondicionado centralizado.