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#PROYECTOS DE ARQUITECTURA RESIDENCIAL
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Casas di Andrea del La
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Un bosquejo rápido y sintético del pórtico de la entrada fue dibujado por instinto después de que nuestra primera visita a la casa. Casi como necesidad.
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Quisimos coger el alcohol de la casa. Quisimos inmediatamente encontrar el germen de nuestro proyecto.
El apartamento está en el tercer/pasado piso de una última construcción hermosa del siglo XVIII. Las referencias históricas finalmente dosificadas definen el façade. Un color amarillo caliente cubre las paredes.
Andrea nos acompaña mientras que habla de la casa. Él nos demuestra los varios cuartos. Uno por uno él abre los obturadores que se han cerrado por un rato largo.
Una luz apacible del invierno revela un espacio well-proportioned auténtico, dividido en cuartos con dimensiones domésticas; muchas puertas hermosas, con dos obturadores y manijas de cobre amarillo, marcan la transición a partir de un ambiente a otro. Las alturas altas de los techos de madera están inspirando nuestras soluciones futuras del planeamiento.
El plan es gobernado por las hachas longitudinales y diagonales que pasan a los cuartos de continuar más allá de las aberturas en el verdor de los jardines circundantes.
Entendemos por instinto que nuestro proyecto tiene que realzar el contexto existente distinguiéndolo.
La línea común tiene que ser elegancia.
La homogeneidad del piso concreto se convierte en por lo tanto la superficie adonde las imágenes diseñadas por las sombras se están moviendo en cíclico una manera diferente. Son largas e intrusas sobre las horas tempranas de la mañana y de cortocircuito y marcadas alrededor de mediodía.
Es una superficie continua que nos acompaña en todos los ambientes que dialogan de una manera complementaria con el techo de madera.
Las ventanas, el grandes y todo igual, excepto del mirador, se distribuyen uniformemente en tres lados de la casa.
La luz entra uniformemente y constantemente en todos los cuartos norteños que colorean el aire con el azul.
Por una parte la elegancia de una sombra móvil grande calienta los cuartos puestos al este y al sur.
Es un privilegio reservado para pocas casas.
El grano suave y vertical de la madera del olmo nos está acogiendo con satisfacción en la entrada. Lo encontraremos otra vez en la biblioteca y en la cocina.
Es un material hermoso y precioso para su color, su textura y su edad y para cuál realza el concreto la naturalidad.