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Cabaña Hawthorn de Rosanna Ceravolo

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Enfrentado a la renovación de una diminuta casa victoriana en Hawthorn, este arquitecto tomó la atrevida decisión de unir baño y cocina, con resultados sorprendentes.

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La arquitecta Rosanna Ceravolo se enfrentó a un plano de planta muy ajustado al renovar la pequeña casa victoriana de Amber, James y Dusty (el simpático caniche de la pareja) en Hawthorn, un suburbio de Melbourne. Pero no se dejó amilanar por ello e identificó la oportunidad de ser lo más innovadora posible. "Cuando el tamaño es un factor, resulta útil crear distracciones mediante gestos audaces, detalles intrincados y juegos de luces", explica. "Así que, aunque mis diseños son bastante limpios y sencillos estéticamente, también hay una cualidad dinámica que se manifiesta principalmente a través de un enfoque meditado de la forma, la escala y la luz, y, en segundo lugar, a través de una selección comedida de materiales y colores."

Este dinamismo prevalece especialmente en la cocina, donde el detalle de la bóveda de cañón atrae la mirada hacia el patio trasero. Esta bóveda amplía el pequeño espacio y crea un punto de interés en el techo rebajado que se encuentra dentro del tejado inclinado del cobertizo existente. Junto con las baldosas marrones, la bóveda de cañón confiere al espacio, cuidadosamente estudiado, una sensibilidad europea, reforzada por el uso de encimeras de Carrara y suelos de terrazo, y una paleta de colores que incluye el verde salvia y una tapicería de terciopelo color mostaza en la banqueta del comedor.

El atributo más llamativo del proyecto es la decisión de Rosanna de unir el baño y la cocina. Esta atrevida decisión permitió mantener intactas las dos habitaciones originales de la parte delantera de la casa y situar todos los servicios juntos en la parte trasera. "Dada la estrechez de la planta, la cocina y el baño estaban en cierto modo enfrentados. Así que pensé que sería divertido combinar uno con otro, iluminando el cuarto de baño desde dentro hacia fuera, lo que genera una iluminación ambiental en la zona de la cocina y el comedor", explica Rosanna.

El cuarto de baño está oculto dentro de un tabique de carpintería a medida con lamas de acero vitrificado. Esta ingeniosa idea deja pasar la luz a la zona húmeda y permite que el resplandor del interior impregne todas las zonas de estar. Internamente, el cuarto de baño es largo y estrecho, por lo que era importante crear una sensación de amplitud, que Rosanna consiguió mediante el acristalamiento, un hueco de ducha de generosas dimensiones y un mueble de carpintería bajo. Tampoco escatimó en alegría, con un armario de espejo lila de gran tamaño que resalta perfectamente entre los azulejos color crema. La conexión entre la cocina y el baño puede resultar inesperada, pero en esta casa recién modernizada es un gesto bienvenido que favorece la funcionalidad y la facilidad de vivir.