Las instalaciones deportivas de varios pisos de NP2F en Burdeos se abren al paisaje urbano circundante

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#PROYECTOS DE ARQUITECTURA PÚBLICA

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"En 2014, por ejemplo, organizamos una exposición sobre la relación entre el deporte y la ciudad en París y sus suburbios, un prisma alternativo a través del cual leer la condición urbana." Dos años más tarde, cuando la ciudad de Burdeos se puso en contacto con la empresa para diseñar un complejo deportivo en su nuevo barrio de Brazza, las lecciones aprendidas investigando la exposición resultaron muy valiosas. "Estudiamos las 17.000 instalaciones deportivas de la región parisina", prosigue Chas, "y resultó que muchísimas de ellas son espacios cerrados que dan la espalda a la ciudad y apestan a sudor rancio y calcetines mohosos" En Burdeos, en cambio, la luz, el aire y la apertura se llevan al máximo.

Situada en el extremo noreste de Brazza, en un antiguo emplazamiento industrial a orillas del río Garona, la UPCA Sport Station, de 66 pies de altura, reúne cinco niveles de actividades dispares que van desde el aeróbic, el culturismo y la escalada, hasta el squash, el deporte de raqueta padel y un campo de prácticas de golf, este último instalado en el tejado, con su red de alambradas señalando el edificio a kilómetros a la redonda. Concebido como destino de ocio donde pasar el día, el complejo también incluye un restaurante en la planta baja y un bar en la azotea, mientras que 13.500 pies cuadrados de locales comerciales, programados en el plan director del distrito de Brazza, ocupan un extremo de la primera planta. Construido íntegramente en hormigón (la única tecnología que podía proporcionar la resistencia y las luces requeridas dentro del presupuesto), el esqueleto del edificio está formado por columnas y vigas de hormigón in situ que soportan suelos prefabricados, un uso moderado del material en consonancia con el objetivo de NP2F, inspirado en Lacaton & Vassal, de hacer más con menos. Con el mismo espíritu, y dado que la mayoría de los deportes pueden practicarse al aire libre, la estructura de la estación se ha dejado en gran medida al aire libre (al igual que el aparcamiento contiguo), y sólo un tercio de los aproximadamente 170.000 pies cuadrados de superficie se ha cerrado y equipado con calefacción, ventilación y aire acondicionado. Las ventajas saltan a la vista: consumo energético muy reducido, menos impuestos para el promotor y el operador (las partes "exteriores" no se gravan) y una relación directa (y bastante espectacular) con el paisaje urbano, tanto para los usuarios como para los transeúntes.

Como casi siempre, esta aparente sencillez es muy engañosa. NP2F pasó todo un año probando diferentes configuraciones con el operador, UCPA (Union Nationale des Centres Sportifs de Plein Air, organización sin ánimo de lucro que gestiona instalaciones deportivas asequibles en toda Francia), que comprobó su viabilidad financiera. Pronto se hizo evidente que el rocódromo debía ser accesible desde la planta baja, lo que significaba que, dado que se eleva a lo largo de tres pisos, el único lugar donde colocar las pistas de pádel, que requieren un espacio considerable, era en el último piso (que, por consiguiente, es más alto). También estaba la cuestión del viento y la lluvia, que pueden soplar río arriba desde el Atlántico con potentes ráfagas. Recurriendo a la tecnología agrícola, NP2F adaptó un sistema de persianas motorizadas de malla de plástico que reducen considerablemente el flujo de aire y humedad cuando están bajadas y están programadas para subir automáticamente en caso de incendio. Aunque el edificio está proyectado sobre una cuadrícula regular, el solar, cuyo perímetro sigue, tiene forma de cuña, uno de los varios factores que convierten una simple estructura de armazón en una propuesta mucho más interesante. "¿Qué mejor manera de demostrar que esta infraestructura tan sistemática es capaz de contenerlo todo que dotar a algunos de sus elementos internos de un carácter propio?", se pregunta Chas. Unas curvilíneas escaleras de hormigón, un conjunto de gradas de hormigón y una cuidadosa escultura de los huecos contribuyen a enriquecer la experiencia espacial.

A diferencia de su colega francés Bruther (Design Vanguard, 2017), a cuya obra puede parecerse superficialmente este edificio, NP2F no es un minimalista maníaco que se desvive por producir una ilusión de estructura pura. En su lugar, prefieren una honestidad más bien ruskiniana: los materiales se exponen tal y como son, mientras que la climatización y los bajantes funcionan libremente, aunque estén cuidadosamente controlados por los arquitectos para evitar el desorden visual que puede resultar de dejar a los contratistas a su aire. De hecho, si este proyecto decididamente experimental ha sido posible, es porque tanto el contratista como el operador estaban de acuerdo desde el principio. El gigante de la construcción Vinci pilotó el proyecto a través de su división inmobiliaria, ADIM, que trabaja exclusivamente con GTM Bâtiment, filial de Vinci, mientras que NP2F recurrió a UCPA, con quien había colaborado en la exposición de París de 2014. Solo así se podía conseguir un edificio tan sobrio -con un bonito acabado de hormigón o detalles como la columna no cilíndrica que se divide para permitir el acceso a las pistas de pádel- por solo 21,3 millones de dólares.

Algunas de las referencias son obvias: El capítulo de Rem Koolhaas sobre el Downtown Athletic Club en Delirious New York y el aparcamiento de Herzog & de Meuron de 2010 en el 1111 de Lincoln Road en Miami. Otros son quizás menos esperados, como el SESC Pompéia de 1986 de Lina Bo Bardi en São Paulo, o francamente oscuros, como la Galeria Metrópole de 1964 de Gian Carlo Gasperini y Salvador Candia, también en São Paulo. Todos tienen en común la idea de programas mixtos desplegados en espacios que no están excesivamente definidos, espacios que, como una plaza pública, pueden albergar todo tipo de actividades. Pero la UCPA Sport Station también se remonta a los preceptos del pensamiento higienista de entreguerras, recogidos en el célebre libro de Sigfried Giedion de 1929 Befreites Wohnen. Licht, Luft, Öffnung (Vida liberada. Luz, aire, apertura), sólo que en este caso se ha evitado el vidrio, el material milagroso de la modernidad, en el contexto del cambio climático. Con el objetivo de producir "edificios abiertos que permitan la vida, en lugar de edificios cerrados que impongan su forma de hacer las cosas", como dice Chas, NP2F espera llevar este enfoque mucho más lejos en el futuro, presentando combinaciones programáticas cada vez más innovadoras y sorprendentes.