DB Arquitetos apila una casa con pantallas de madera en la costa brasileña

El estudio de arquitectura brasileño DB Arquitetos ha terminado una casa de vacaciones rodeada de una pantalla de madera en un paraje boscoso a las afueras de São Paulo (Brasil).

La Casa VJC Iporanga, de 660 metros cuadrados, está situada en un complejo residencial de Guarujá, a unos 100 kilómetros al sureste de São Paulo, en la costa atlántica.

La casa fue terminada en 2023 por el equipo brasileño DB Arquitectos, liderado por el arquitecto David Basto, y Marina Salles Arquitectura e Interiores, que previamente renovó el interior de la residencia principal del cliente en el centro de São Paulo.

La casa, de cinco niveles, está delicadamente apilada a lo largo de una empinada ladera en un terreno de densa vegetación.

"Una invitación a la inmersión, la propuesta aprovecha la doble capa que rodea la residencia, desde la paleta de materiales naturales aplicados a la base, hasta el dosel de árboles -aludiendo a una casa del árbol- sugiriendo un refugio", dijo el equipo a Dezeen.

"Una pausa al frenesí urbano, este es el lugar ideal para ralentizar el ritmo, haciendo hincapié en el estilo de vida tranquilo"

Las plantas inferiores albergan zonas privadas para dormir, rodeadas por las plantas del exterior a través de aberturas; mientras, las plantas superiores albergan los espacios sociales, con vistas a las copas de los árboles y al paisaje costero.

El tejado de dos niveles está sostenido por columnas redondas de hormigón. Las zonas de estar están flanqueadas por acristalamientos del suelo al techo con marcos correderos de color bronce.

En la planta superior, la cocina, el comedor y el salón están acabados con un techo de tablones de madera de Cumaru y suelos de granito, que traducen f comodidad y ligereza.

"En la decoración, la mezcla de piezas de madera, lino, paja, ratán y cerámica sugiere la sencillez de una auténtica casa de playa, sin olvidar el fácil mantenimiento y la durabilidad frente a los efectos del tiempo y el aire marino", explica el equipo, que destaca la pareja de sofás Jocal y los sillones de lona impermeable Iporanga House, Marina Salles.

El nivel principal también contiene elementos de madera clara, como un sillón de ratán Xangai, bancos indígenas, mesas auxiliares nido a medida y un arcón, un aparador y mesas de centro encargados a un taller de carpintería de Tiradentes.

Los espacios sociales se abren a un balcón con un solárium equipado con una pérgola de madera rústica, una cocina exterior y muebles seleccionados para complementar las piezas del interior y proporcionar continuidad entre el interior y el exterior.

Una pequeña piscina rectangular sujeta el borde de la cubierta con una barandilla de cristal para proteger el borde del balcón.

"Al fomentar una experiencia integrada con la naturaleza en la terraza, la ausencia de cerramientos intensifica la conexión de los residentes con el paisaje, como un observatorio en el que el mar se ve por encima de las copas de los árboles", explica el equipo.

Debajo, las suites están protegidas de la intemperie con paneles de listones de madera de Cumaru, que envuelven la fachada y forman barandillas de media altura y lamas plegables.

Cuando están cerradas, las pantallas permiten que las plantas inferiores desaparezcan en el bosque como una masa de madera. Cuando están abiertas, las pantallas dejan ver las bandas a lo largo de los distintos niveles.

Las suites están decoradas en tonos beige, verde y azul, inspirados en las ilustraciones de temática náutica que Salles esbozó para los detalles bordados.

Los biombos de madera también ocultan un cine en casa con cortinas de lino que filtran la luz natural, una alfombra de rayas naranjas y verdes y cestas de paja creadas por artesanos locales.

Otros proyectos realizados recientemente cerca de São Paulo son una casa con patio en voladizo de Marcelo Couto y Rodrigo Oliveira y un apartamento reformado con "dos universos" de Pascali Semerdjian.