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Wayfarer | KIDZ

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Wayfarer es un espacio versátil para quienes se encuentran temporalmente lejos de casa. El proyecto crea una atmósfera en la que cada viajero puede encontrar calidez, paz y un sentimiento de pertenencia dentro de un espacio compartido.

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En una ciudad como Dubai, repleta de cafés, restaurantes y discotecas, faltan lugares que combinen sencillez y calidad sin dejar de ser accesibles para todos. Wayfarer brinda esa oportunidad, ofreciendo comodidad y calidez para todo, desde reuniones de negocios hasta relajarse tranquilamente.

El nombre Wayfarer simboliza que todos somos personas con caminos diferentes, pero unidas por una búsqueda común. El interior del espacio refleja este viaje simbólico del viajero: el camino comienza en la zona de comida para llevar, donde los visitantes pueden hacer su primera parada para tomar un cruasán o una pasta choux y una taza de café. Esto representa el primer paso hacia el conocimiento y el descubrimiento. Un elemento central es el árbol, que simboliza la idea de iluminación y significado. El viajero avanza por las zonas de asientos junto a las ventanas, donde puede hacer una pausa para conversar y descansar.

El espacio rectangular alargado está dividido en zonas, organizadas a lo largo de un eje central. A la izquierda de la entrada hay asientos a modo de terraza junto a las ventanas, seguidos de un espacio más profundo iluminado por una suave luz exterior, que crea el efecto de luz natural. La zona principal con el árbol da paso a un pasillo que conduce a los aseos, donde las altas columnas y los efectos luminosos crean una sensación de bosque y profundidad.

Los materiales de acabado se han seleccionado cuidadosamente para resaltar el simbolismo del viaje, incluido el yeso gris aplicado a mano, que simboliza la imperfección de cada paso. La zona de asientos utiliza madera clara para dar al espacio una sensación de calidez, mientras que la madera más oscura crea una zona para conversaciones profundas. La zona de comida para llevar está diseñada en tonos marrones cálidos, que subrayan la fugacidad de la parada.

En el interior destaca el enfoque en un diseño ortostático, con una línea directriz representada por tubos metálicos brillantes. Estas líneas luminosas, que parten del mostrador del bar, conducen a los clientes hacia el árbol central y más allá a lo largo del vestíbulo, simbolizando el movimiento y la búsqueda. Wayfarer es un espacio donde cualquiera puede encontrar tanto una breve parada como un lugar para una lenta conversación con un nuevo amigo o pareja.

Arquitectos: Ruben Movsisian, Yulia Tsuglenok, Ruslan Maikov, Daniil Savinskiy, Artem Lebedev, Tatyana Kurochkina

Fotografía: Proyecto Oculis (https://www.oculisproject.com/)